Las cadenas de la autocensura

El acto de censurar o clasificar nuestro propio trabajo (blog, libro, película u otro medio de expresión); solo se hace por una razón valida: por miedo, por respeto vehemente, por temor a herir susceptibilidades, por temor a ser heridos, encarcelados o sufrir las consecuencias de expresar lo que sentimos de otras personas, sistemas sociedades. La autocensura es real porque existe la presión expresa, legal o poder de represión, que nace de una persona específica o institución con la autoridad y fuerza física suficiente para ejercer el contra ataque a las palabras o expresiones artísticas con golpes, insultos o destrucción del medio de expresión.

La autocensura existe y es una creación de quien se censura, no por gusto o placer propio, lo hacen por simple necesidad de supervivencia, miedo al dolor, terror al escarnio en publico o pánico a ver su obra destruida. La autocensura a menudo, es practicada por productores fílmicos, directores cinematográficos, editores, periodistas, músicos, pintores, comediantes, cómicos, escritores, presentadores de noticias, entre otros.

Por esta causa las personas no manifiesta su verdadera opinión, por miedo a las consecuencias ocurriendo entonces una paradoja, el autocensurado termina renunciando a su libertad de expresión y a su libertad personal como primeras consecuencias. La otra consecuencia es la misma que represar un rio sin darle salida, esos sentimientos y pensamientos reprimidos terminan brotando en forma de odio y violencia irracional, virulento y desenfrenado contra si mismo, contra el represor y contra los demás. No necesariamente en ese orden.

La autocensura es mas agresiva que la censura. Esta ultima deja la sensación de alivio cuando le recuerdas al censor su origen materno; también es posible verle la cara a quien tacha, corrige y destruye la obra, existe el contacto personal con quien reprime dando eventualmente la satisfacción de brindarle una bebida con laxantes o una probada del sabor de los nudillos del censurado entre los labios del censurador. La autocensura no da para eso. El único consuelo son las heridas físicas y morales autoinflingidas de frente al espejo, lo que es, de cualquier manera, bien poco, como consuelo, pues la noche terminara metidos en la cama no solo quien ejerce la autocensura, si no, sintiendo que ese castigo no basto para dar termino al sufrimiento.

Para tener una idea de tal sufrimiento solo tenemos que ver a los venezolanos atrapados en su territorio: están muy asustados e impedidos para actuar, expresarse y decir lo que siente; se autocensura porque están rodeados de quienes constantemente los bombardean con un discurso de represión; desde lo mas alto están los de Contrainteligencia militar, los de inteligencia militar, los de la policía de investigaciones científicas, los cuerpos especiales de represión policial, las acciones especiales de represión disfrazadas de anti insurgencia y contrainsurgencia política, Fuerzas de Acciones Especiales, los cuerpos de investigaciones penales; a nivel medio están todos cuerpos y organizaciones pertenecientes a la policía nacional, las direcciones regionales de inteligencia policial, los grupos de reacción inmediata para el control de manifestaciones urbanas no autorizadas; a nivel mas intimo están los compatriotas cooperantes, los colectivos de paz, los comités de abastecimiento los jefes de calle, los miembros del concejo comunal, la vieja CDSM que quiere ganar puntos para que le pasen, no una, si no, dos bombonas de gas, la mujer del enchufado, el enchufado, el gobernador, los alcaldes, los diputados activos, los diputados electos, los diputados suplentes, los que no salieron electos pero que están esperando que alguno de los diputados anteriores se muera para ocupar el curul, el señor que barre la calle, el que trabaja en una oficina publica o empresa en manos del estado a quien lo chantajean para que delate al inconforme, al que habla mal, al que se queja; finalmente están los milicianos (son casi 400 mil); los que están esperando casa de la misión vivienda y están buscando formas para figurar; los graduados de las universidades y que esperan un trabajo en el gobierno. Y las herramientas para motivar la autocensura son variadas, muy variadas. El internet, lo trancan, sabotean o estropean. Bloquean la entrega de asistencia social (comida y bonos).

Quienes se quedaron en Venezuela tienen miedo miedo, hambre, frio y están a oscuras. Están paralizados entre, una oposición tan estúpida e inoperante que logra que los miembros del gobierno se vean como gente muy inteligente. (observación: muchos dicen que el Presidente es un burro, un animal, pero en la misma frase agregan que es una mente depravada, un desalmado, un ser malévolo que desea el mal de quienes vivimos en el pais, y eso ultimo requiere de mucha, mucha inteligencia)

Por el otro lado esta un partido de gobierno fundido, mesclado y apoderado del Estado, que esta mas ocupado y preocupado por permanecer en el poder que en ayudar a los ciudadanos a salir del atolladero económico en que nos encontramos y que es el mismo en que se encontraría cualquier otro gobierno, la diferencia será la forma de afrontarlo y de manejar la creciente frustración de los habitantes del pais. Si el gobierno actuara como buen padre de familia renunciaría en pleno y admitiría que fueron derrotados, si no por la oposición, lo son por la economía mundial, o por los precios de las materias primas, por el hambre, por el cambio climático o por el mal de ojo enviado por la bruja del diamante; en cambio prefieren permanecer en el poder aun cuando saben que los demás morimos de hambre y necesidades (total ellos y su entorno están bien) y que su dimisión creara una diferencia, generara esperanza, una luz, algo. Pero ellos tratan de cambiar la situación haciendo una y mil veces lo mismo, con igual pésimo resultado, hambre desesperación y su permanencia-

Cualquier padre de familia sabe cuando perdió y es hora de dejar el hogar por el bien de la familia, ellos lo saben (el partido en gobierno) y aun así no les importa. Por otra parte la oposición (¿Cuál oposición?) nos pide que sálgannos a la calle, que protestemos hasta la muerte por la falta de electricidad, gas, medicinas, gasolina y velas, que nos rebelemos contra esta dictadura, pero, ¿Qué hacen ellos? a ellos no los veo morir como mueren los ciudadanos del pais en las calles, yo no los veo a ellos sufrir como sufren las madres en los hospitales. Son tan decepcionantes que parece que son peores que los fanáticos del partido que gobierna al Estado, la naciòn y controla el gobierno.

Los venezolanos que están en esa tierra siguen allí, de pie, pero desfallecidos, desesperanzados, tristes, acobardados, castrados y sin nada mas que esperanzas, como arboles en la tierra de nadie. Esperan que todo sea como antes, esperan que todo mejore, esperan que los objetos que se quedaron sin amo se reencuentren con sus dueños, que los náufragos de Güiria se rencuentren con sus tumbas, esperan que los desaparecidos en Falcon encuentren el camino a Punto Fijo, que los muertos de la frontera sean encontrados, tienen esperanza que padres e hijos se reencuentren en la próxima navidad.

Gracias a Dios las esperanzas son lo ultimo que se pierde, pero en ocasiones también estas se diluyen en un sueño lleno de mentiras, como la de gobiernos de transición, perniles de navidad, de curas milagrosas, de "invasiones humanitarias pa`ahorita" decretos que ordenan ser felices y Presidentes, Asambleas y Tribunales en el exilio. Y no culpo al presidente en exilio, eso de ser coñaziado, estar preso y sin sentencia no debe ser algo bueno (el miedo es libre y a ningún hombre se le puede exigir que se sacrifique a si mismo) aun cuando hombres como Nelson Mandela puedan opinar lo contrario.

Esas son las razones por las que algunos son victimas de la autocensura. Pido disculpas por estas líneas un poco violentas, pero el alma caliente, inconforme y desosegada obliga a los dedos a escribir para sentirse mejor.